#VinosEcológicos

Cuando hablamos de vinos ecológicos tenemos que tener en cuenta que estos se elaboran a partir de uva ecológica. El requisito que deben cumplir es no haber recibido tratamiento de abonos, principalmente los nitrogenados, o plaguicidas químicos, tan sólo la utilización de métodos naturales y tradicionales de cultivo, con abonos orgánicos. Esto queda recogido en Reglamento (CE) nº 834/2007, sobre producción y etiquetado de los productos ecológicos.

La mejora de la fertilidad del suelo constituye una prioridad en el cultivo ecológico. Del manejo del suelo va a depender tanto la nutrición adecuada de la vid como una protección eficaz contra plagas y enfermedades. Por eso, las prácticas que dejan el suelo desnudo o que no aportan materia orgánica, van degradándolo, dejando que se erosione y haciendo que pierda tanto su estructura física como la vida que en él habita, desde microorganismos hasta lombrices.

Para la recogida de un fruto ecológico, los tratamientos habrán tenido que llevarse a cabo desde todo el proceso de formación de la uva, realizando medidas preventivas y culturales, (algunas de ellas), para prevenir contra la enfermedad que ataca a todos los órganos verdes de la vid, llamada Mildiu; esto es debido, porque las uvas ecológicas, al no llevar estos tratamientos en la planta, son más susceptibles de ser atacadas por ella. Deberemos realizar un manejo adecuado de la ventilación entre los sarmientos, con despuntes o podas en verde y se realizaran aclareos de las hojas con síntomas de la enfermedad.

La prevención para el Oídio, hongo que también ataca a muchos de los viñedos ecológicos, consiste en implantar unos sistemas de conducción que permitan una buena aireación y prevengan de un sombreo excesivo.

Todas las etapas que atraviesa la uva ecológica desde la recolección en campo hasta la vinificación en bodega tendrán que ir separadas del resto de uvas, en el caso de que hubiese, aislando los vinos ecológicos de aquellos que no lo son. La separación también afecta a las fases de almacenamiento de productos enológicos (aditivos)…, y se mantendrá siempre un registro documental adecuado que demuestre dichas separaciones.

Las disposiciones específicas para la producción de vinos ecológicos dictan que en la elaboración enológica de estos vinos está prohibida la concentración parcial por frío, la eliminación de anhídrido sulfuroso mediante procesos físicos, tratamiento por electrodiálisis para la estabilización tartárica del vino, desalcoholización parcial del vino y el tratamiento de intercambiadores de cationes para la estabilización tartárica de este.

Por otro lado, se autoriza los tratamientos térmicos cuando la temperatura no supere los 70ºC y la centrifugación y filtración con o sin coadyuvante, siempre que los poros no sean inferiores a 0,2 micrómetros. Estos aditivos y coadyuvantes tecnológicos preferentemente serán derivados de materias primas cultivadas ecológicamente. El uso de dichos productos vendrá regulado por el artículo 21 del Reglamento (CE) nº 834/2007.

Como resumen, la diferencia entre los vinos ecológicos de aquellos que no lo son, radica principalmente en la viticultura, en la uva que no recibe los mismos tratamientos, en los trabajos realizados en la planta para la prevención de enfermedades, al ser más sensibles a estas y en su proceso de elaboración al estar prohibidos determinados aditivos. Los vinos ecológicos responden a un cultivo más respetuoso con el medio ambiente.

¿Te animas a probarlos?