#Freixenet, 100 años entre Burbujas
Es un honor escribir sobre una Gran Empresa que cumple 100 años de Historia, desde 1914 que dio comienzo el negocio del cava; aunque hay que remontarse a 1861, cuando Francesc Sala Ferrés fundó la Casa Sala. Producía y comercializaba sus vinos en un mercado de clientela de la zona, en Barcelona y a diferencia de las otras masías similares que elaboraban vino, exportaba una buena parte de su producción a Sudamérica.
Casa Sala fue un negocio floreciente durante años hasta que a finales de los ochenta del s. XIX la plaga de la filoxera entró en el Penedès y mermó en pocos años los rendimientos de la viña hasta hacerla no rentable, provocando finalmente la muerte de la vid.
Ya iniciado el s. XX, tras haberse descubierto que el pie de viña americano era inmune a la plaga, comenzaron las replantaciones en toda Europa mediante el injerto de las variedades de vid europeas sobre pie americano.
Las primeras etiquetas de cava salieron al mercado bajo la marca Freixenet Casa Sala. Desde el primer momento optaron por elaborar exclusivamente cava, un vino espumoso natural, siguiendo el método utilizado en la Champaña (Francia) desde el siglo XVIII.
En 1914, los fundadores de Freixenet, Pedro Ferrer, que aportó la fuerza empresarial y Dolores Sala, la sensibilidad elaboradora para conseguir grandes Cavas. Su primera innovación fue replantar sus viñas únicamente con variedades blancas autóctonas para elaborar un vino espumoso como el más preciado de los champagne, el Blanc de Blancs consagrado como el Rey de los Vinos y no sólo vino de reyes, sino también estandarte del éxito de la nueva clase social europea, la burguesía enriquecida con las diversas aplicaciones de la II Revolución Industrial.
En tan solo 22 años de actividad desde que en 1914 se lanzara al mercado la primera botella con su marca, Pedro Ferrer y Dolores Sala habían lanzado Freixenet hasta la segunda posición del ranking español; habían construido una moderna cava en el Barrio de la Estación de Sant Sadurní de Noya y sin duda era la marca con mayor potencial de crecimiento y velocidad en ser reconocida.
La notoriedad de la calidad de sus productos y, el esfuerzo y ambición por ser los mejores, llevo a sus fundadores a impulsar el negocio en otros mercados, emergentes en la época, entre los años veinte y treinta, estableciendo en los Estados Unidos su primer establecimiento, en 1935.
Freixenet, 100 años entre Burbujas es el reconocimiento al esfuerzo de una gran empresa, a la dedicación de sus fundadores, a la capacidad emprendedora, a la vocación clara por expandirse internacionalmente; aspectos que han hecho posible que 100 años después, Freixenet sea una marca líder mundial en la elaboración de cava. Habiendo superado incluso, varios conflictos bélicos que ralentizaron el desarrollo de la empresa.
La Guerra Civil Española truncó la aventura y el sueño de llegar a ser los mejores. En 1936 Pedro Ferrer es fusilado por la facción anarquista y Juan, su hijo mayor, también desaparece. Freixenet queda huérfana de uno de sus fundadores y es colectivizada durante la guerra, tras la cual Dolores, con la ayuda de su hija Pilar, reemprende la gestión de la empresa familiar casi empezando de cero.
Freixenet, 100 años entre Burbujas, 1ª parte