#VendimiaRueda
La vendimia en la Denominación de Origen Rueda es el momento que las bodegas esperan durante todo el año, que las mantiene con la mirada puesta en la climatología, deseando que sea la esperada, que la cosecha no se vea afectada por esta, y que la calidad resulte óptima. Dedicados al viñedo durante toda la temporada, cumpliendo rigurosamente cada trabajo que la viña demanda, así transcurre el año. Cada viticultor realiza los trabajos indicados por la bodega, para mimar y cuidar el viñedo, y que la viña se desarrolle en condiciones favorables.
Antes de proceder a la apertura del lagar o bodega, tendrán que realizar las comunicaciones oportunas al Consejo Regulador de la Denominación de Origen Rueda; siendo este quien delimita el reglamento que afecta a la zona, de modo que ellos puedan verificar, en cualquier momento, las entradas de uva en bodega, así como la vendimia en campo. Las personas designadas por este Organismo son los veedores.
Durante la campaña la actividad mantendrá a todo el personal de bodega ocupado. Todo está listo en bodega: la prensa, el grupo de frío, las bombas de trasiego, los depósitos… Parece fácil pensar en la entrada de la uva en la tolva de recepción; pero antes de proceder a su entrada, se deben tener en cuenta todos los requisitos burocráticos que el vino debe cumplir, siendo los enólogos (muchos de ellos químicos) junto con su equipo, quienes tienen que realizar los requerimientos que el Consejo Regulador les marca.
Previamente, durante el mes de agosto, se realizan los aforos que delimitaran la producción del viñedo. A su vez se verifican los parámetros de grado probable y la acidez. Dependiendo de estos factores se marcará el inicio de la Vendimia de variedades blancas en la Denominación de Origen Rueda, que será clave para la elaboración de los vinos. El orden está definido por la precocidad de la variedad de uva, siendo la Sauvignon y la Chardonnay de las primeras. En ocasiones, la climatología, y el suelo donde se asienta el viñedo, hacen que otras variedades se simultaneen.
La vendimia nocturna se realiza con máquinas vendimiadoras; estas realizan un bazuqueo sobre el viñedo, movimiento que separa el raspón de las bayas, de modo que estas quedarán en la máquina, para su posterior traslado a la bodega, donde se descargarán en las tolvas de recepción. Gracias a los avances tecnológicos en el sector vitícola, el viñedo apenas sufre estrés durante la recogida de la uva a máquina.
En cambio, la vendimia manual, que tiene lugar durante el día, donde el personal contratado será el encargado de la recogida; estos depositarán los racimos en cajas de plástico, de no más de 20 kg, para su posterior procesado en la bodega. Una vez en esta, los racimos pasaran por una mesa de selección, donde las bayas y los racimos que no estén en buenas condiciones se desecharan. El cuidado de la uva y de la cepa es mayor en la vendimia manual, provocando un menor estrés al viñedo.
Este proceso continúa por unas cintas transportadoras hasta la despalilladora, aquí se separa el raspón de la uva, y esta, formando una pasta, pasa a la prensa; en ella se extraerán los primeros mostos, clasificándose por los diferentes prensados, lo que marcará una característica que afectará a la calidad final del vino.